2 mar 2013

Acuarelas

Paisajes en la pared


Desde el Renacimiento, la acuarela ha sido la técnica elegida por naturalistas, exploradores y viajeros en general para registrar sus observaciones, descubrimientos y aventuras.

Durante el siglo XIX fueron muchos los artistas –como Eugene Delacroix o Gustave Dorée, entre otros– que peregrinaron a los Alpes y Pirineos en busca de los escenarios bucólicos del mundo rural o los más dramáticos de las cumbres, plasmándolos en espléndidas acuarelas. También los primeros naturalistas y exploradores del Pirineo –como Ramond de Carbonnières o Franz Schrader– encontraron en la acuarela el medio perfecto para dejar constancia de su asombro ante los paisajes que descubrían.

Las acuarelas por sus características de luminosidad y transparencia parecen ser el recurso más adecuado para representar la luz y los efectos atmosféricos, y para describir el paisaje: montañas, marinas, cielos, nieblas, nubes... logrando evocar la fragilidad o el dramatismo de la naturaleza, a veces cierta nostalgia e incluso misterio, aspectos que la fotografía –más pegada a la realidad– no siempre consigue reflejar.

Yo no entiendo de pintura, no sabría decir si tal o cual obra posee mayor o menor valor artístico, tampoco si tiene más mérito la acuarela que el óleo o cualquier otra técnica. Sólo puedo hablar desde la subjetividad de las sensaciones que me transmiten. Cuando contemplo fotografías de paisajes el sentimiento que me domina es el de la acción, el anhelo de caminar por ese sendero, ver lo que hay detrás de aquella montaña,... en definitiva el deseo de ser yo quien esté en ese lugar en vez del fotógrafo. En cambio, las acuarelas, quizás por reflejar más que un paisaje, una interpretación del mismo, me inducen a la contemplación, me traen recuerdos, me sugieren otras perspectivas.

Teniendo en cuenta la tradición paisajística de la acuarela, es totalmente coherente que el Club Vasco de Camping Elkartea, de vocación montañera y por ende de naturaleza y paisaje, acoja en su sala de exposiciones la selección de obras que Mary Vicente y Elena Díez nos presentan.

Es otra manera de disfrutar de la montaña...


















1 comentario:

  1. ! Que agradable sorpresa ! me comenta Sebas que lea el nuevo artículo del blog de Juan Car, y veo en él algunas de mis acuarelas. Disfruté mucho en el momento de pintar y ahora otra vez al verlas. Te ha quedado una bonita entrada.

    Mary

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